Los jardines terapéuticos pueden aportar muchos beneficios a personas con discapacidad, empezando por el más importante, que es que están pensados para que disfruten de la naturaleza y se relajen. Es un lugar de descanso en el que sentirse a gusto, pero también en el que pueden realizar diferentes aprendizajes.
Dentro de los beneficios de los jardines terapéuticos nos encontramos con que favorecen la estimulación multisensorial y permiten aprender labores de jardinería, lo que a su vez es bueno para la inserción social y laboral de las personas con discapacidad. También lo es para que mejoren su autoestima y se sientan bien consigo mismas y para que desarrollen más destrezas manuales.
Mientras ofrecen cuidados y atención a otros seres vivos, como son las plantas, las personas que se encuentran en jardines terapéuticos mejoran su autoconfianza, seguridad en sus capacidades e incluso ver cómo crecen asumiendo nuevos retos. Podrán ver la evolución del jardín y sus plantas tras su intervención y con el paso del tiempo.
Por otro lado, cabe resaltar que la naturaleza nos hace sentir bien. Así lo indican diversos estudios, que demuestran que el contacto regular y la actividad física en espacios verdes son beneficiosos para la salud física y mental. Los factores relacionados con el medioambiente, como la calidad del aire o la proximidad a los espacios naturales, tienen un peso de más del 20% sobre el estado de salud y la mortalidad de las personas.
A la hora de la preparación de los jardines terapéuticos, es necesario tener en cuenta las distintas necesidades de las personas con discapacidad para adaptarse a todas ellas, además de crear zonas que estimulen los 5 sentidos de diferentes formas. Por ejemplo, se pueden poner plantas aromáticas para disfrutar de los olores, espacios de relajación, de observación, etc. Son muchas las posibilidades que se pueden plantear dentro de ellos.
En todo caso, estos espacios deben adaptarse a sus desafíos y motivaciones, pero también a sus limitaciones, buscando lograr los objetivos planteados.
Servier y FUNDACIÓN JUAN XXIII han inaugurado recientemente El Jardín de los Sueños, una iniciativa piloto en España. Se trata de un jardín y huerto terapéutico y sensorial que lidera la propia Fundación y está co-diseñado por un equipo multidisciplinar de profesionales..
Localizado en el Colegio de Educación Especial de Madrid CISEN y Hospital de Día CET-Norte, el jardín está diseñado para convertirse en un espacio estimulador e innovador que fomente las capacidades cognitivas y emocionales de los participantes, así como potenciar su cooperación y socialización.
Se está asimismo trabajando en una metodología de sesiones terapéuticas aplicadas al espacio con indicadores medibles que permitan detectar las mejoras de las personas usuarias, lo que permitirá conocer todavía más los efectos positivos de El Jardín de los Sueños.
Además de los beneficios asociados a los jardines terapéuticos, esta iniciativa ofrece beneficios sociolaborales asociados, ya que fomenta la creación de empleo de calidad y estable para personas con discapacidad intelectual. Concretamente, dos trabajadores de la Fundación han podido formarse con este proyecto
Con este jardín y huerto, se trabajan 10 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.
Si quieres quieres crear un jardín terapéutico y estimulante, ¡contáctanos! Nuestro equipo de soluciones verdes puede ponerse manos a la obra.