La autonomía es una capacidad que permite a cada persona actuar independientemente, operando de manera voluntaria y tomando las decisiones que en cada momento cree convenientes. Es un derecho inalienable, que cada individuo posee en diferente grado, dependiendo de su aprendizaje y de las diferentes limitaciones a las que está expuesto. Las personas con discapacidad intelectual se enfrentan diariamente a diferentes situaciones donde les es muy complicado desenvolverse de manera óptima. Este hecho se debe principalmente a la falta de entornos y contextos adaptados cognitivamente que puedan garantizar su plena accesibilidad. En la actualidad, no existe una definición universal sobre accesibilidad cognitiva, pero una de las acepciones más aceptadas procede de la entidad estadounidense “The Arc”, y fue utilizada por primera vez en España por la Fundación ONCE: “Derecho a comprender la información que nos proporciona el entorno, a dominar la comunicación que mantenemos con él y a poder hacer con facilidad las actividades que en él se llevan a cabo sin discriminación por razones de edad, de idioma, de estado emocional o de capacidades cognitivas” Algunos de los entornos donde comúnmente se encuentran barreras que limitan los accesos de este colectivo son:
Fundación Juan XXIII Roncalli consciente de las barreras que limitan la autonomía de las personas con discapacidad intelectual, trabaja incesantemente para crear nuevas oportunidades que incidan positivamente en su integración sociolaboral. El curso “Consultor de entornos y contextos accesibles” es un proyecto de formación para
De esta manera, no sólo se dará una respuesta a las necesidades de las empresas y demás organizaciones, sino que se generarán puestos de trabajo en un ámbito que rompe con el paradigma clásico del empleo de las personas con discapacidad intelectual.