Cestas de Navidad solidarias es igual a impacto directo en el empleo

| por José Antonio Morena Pardo

Entre los regalos de fidelización de empleados o como parte del plan de beneficios de una empresa para sus trabajadores se suele contar cada año con las famosas “Cestas o Lotes de Navidad” pero no es hasta septiembre cuando llega el momento del concurso de proveedores, selección del tipo de cesta navideña, adquisición y finalmente distribución de la misma. El abanico de posibilidades para su configuración es muy variado: convencionales, ecológicas, alternando algún producto tecnológico o corporativo, ofreciendo la posibilidad de sustituirlo por una donación solidaria a alguna fundación o asociación o sustituyéndolo por regalos más modernos como cofres experiencia. Ya sea si la opción elegida es una u otra, no hay época del año que más invite a la solidaridad y regalo que más se preste que la “Cesta de Navidad”. Si confía en un proveedor profesional que además esté asociado o sea un Centro Especial de Empleo, tendrá asegurado el éxito.

¿Cómo la compra de Cestas de Navidad contribuyen a crear empleo?

Cuando el obsequio a empleados, clientes o proveedores se convierte en un elemento responsable se crea un impacto directo positivo en el empleo de las personas en riesgo de exclusión. [su_youtube_advanced url="https://youtu.be/X7c7cTBBfXc" width="500" autoplay="yes" rel="no" theme="light"] [embed]https://youtu.be/X7c7cTBBfXc[/embed] [/su_youtube_advanced] Más allá de la preparación de los pedidos, manipulado de los productos y montaje de los lotes navideños, pasos que forman parte de las fases de una cadena de montaje común, las personas encargadas de estos trámites, operarios, jefes de producción, etc. están realizándose profesionalmente y las empresas contratantes se convierten en socialmente consecuentes con la sociedad cuando contratan los servicios de un Centro Especial de Empleo como Roncalli. Así, obtienen un doble beneficio al sumar la tramitación de las medidas alternativas, a las que la Ley General de Discapacidad (LGD o antigua LISMI) les da derecho, imputando los costes de este servicio para el cumplimiento de la norma y la creación de empleo responsable y de calidad para personas con discapacidad.

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