El tener un huerto ecológico en Madrid tiene algunas dificultades, una de ellas es el clima, los meses de tomates, calabacines, pimientos, berenjenas, están limitados y cuando por fin comienzan llegan las vacaciones y la ciudad se vacía.
A diferencia de la agricultura industrial, en la agricultura ecológica, no existen modelos uniformes, por ello requiere más observación, mucho estudio y conocimientos y ensayos para adaptar el modelo productivo al agroecositema: clima, fauna y flora silvestre, suelos, etc.
Nosotros hemos incluido dentro del agroecositema a nuestros consumidores una especie que migra en verano y que quiere tomates todo el año. Y para ello, hemos utilizado este año microtúneles, adelantando el cultivo que antes realizábamos en mayo/junio.
El resultado adelantamos una mes y medio la producción
En esta ocasión nuestro ensayo ha sido satisfactorio, hemos conseguido adelantar un mes y medio la producción. Además hemos elegido plásticos, arcos y estacas de calidad son reutilizables varios años, de esta forma que reducimos al máximo el impacto ambiental y amortizamos los costes.
