Cada vez sois más y tenemos que prepara muuuuchas cestas ecológicas, pero eso no nos quita de pasar muy buenos ratos mientras lo hacemos. La variedad de calabaza gigante que estamos utilizando ahora nos hizo recordar una genial historia de nuestra infancia.
Queríamos compartir el momento con vosotros para que aprovechéis y contéis este cuento a los niños y niñas que tengáis cerca: alumnos, sobrinos, hijos, nietos...Y les acerquéis también las fabulosas ilustraciones de Quentin Blake.