Hoy nos atrevemos a más, a mezclar dos alimentos que muchos no imaginarían que podrían hacer un buen "matrimonio". las lentejas y las mandarinas tienen excelentes propiedades que sumadas, pueden formar un gran equipo para lograr una alimentación saludable y equilibrada. El resultado es gratamente sorprendente y sabroso, y aunque no suene muy atractivo, os animo a probar esta deliciosa novedad culinaria!
Proteínas sin el colesterol de la carne, es una de las ventajas de ingerir lentejas con regularidad. Por otro lado, las vitaminas que nos aportan las mandarinas, son las mejores aliadas para esta época del año donde el paso de una estación a otra nos puede afectar al organismo y ser más propensos a darle entrada a un resfriado. Además, es buen momento para ir cambiando los platos de cuchara por los de tenedor, puesto que ya nos viene asechando el buen tiempo y con él, las comidas a temperatura ambiente como esta atrevida ensalada que hoy presentamos.
Es un plato súper sencillo que os ayudará a llevar mejor la rutina del día a día, puesto que el tiempo y el esfuerzo empleado para su preparación es mínimo en comparación con los beneficios que os proporcionará. No os quedéis con la duda y poned en práctica nuestra teoría, que aunque no lo creáis, solemos tener razón!
Preparación:
Pon a cocer las lentejas evitando que se abran mucho. Pela la mandarina y desmenuza en gajos. Pica el puerro muy pequeñito. Ralla la zanahoria en tiras. Haz una cama de canónigos y pon encima las lentejas. Luego esparce el puerro, zanahoria y aceitunas por encima. Prepara una vinagreta con el aceite, vinagre y sal y aliña. Luego coloa las nueces por encima y listo!
