1 de agosto 2015.- La Fundación Juan XXIII - Roncalli ha apostado este verano por los más pequeños para que pasaran un verano diferente y único. En este campamento urbano, niños de 8 a 12 años y personas con Discapacidad Intelectual de la Fundación Juan XXIII - Roncalli han compartido todo tipo de actividades: se han divertido con las yincanas, han podido realizar manualidades, han hecho pizzas y hojaldres en la cocina, han realizado su propio programa de radio en los estudios de la Fundación, han jugado a varios deportes, han cuidado un huerto y también han disfrutado con una película en nuestro cine.
Los buenos resultados de un proyecto que nació destinado a los hijos de los trabajadores de la Fundación en verano, este año han inspirado la creación de INTEGRA CAMP, un programa pionero en materia de campamentos urbanos por su planteamiento de integración de niños y niñas, con Personas con Discapacidad Intelectual.
“Queremos que los niños que nunca han tenido contacto con la discapacidad puedan convivir durante un tiempo sostenido con personas que la tienen. Que aprendan quiénes son, que los conozcan y que puedan comprenderles para que cuando sean adultos sean capaces de facilitar su integración”, decía Paloma Sol, Gerente de la Fundación Juan XXIII - Roncalli.
Después de la experiencia los niños y las personas con Discapacidad Intelectual nos cuentan cómo lo han vivido:
Laura:
"Es la primera vez que un campamento viene a la fundación a ver cómo trabajamos y como hacemos las actividades. Estoy muy encantada, los niños son muy buenos, nos ayudan en los trabajos, nos miran como trabajamos y eso y les hemos enseñado también".
Lucía. 10 años:
"Lo que más me ha gustado ha sido la yincana y la guerra de agua y me lo he pasado muy bien haciendo actividades con todos ellos. Yo pensaba que iban a tener más dificultades que nosotros para hacer las cosas pero me ha parecido que son iguales que nosotros y porque sean discapacitados no tienen que ser distintos".