A lo largo del 2016, más de 34 mil personas participaron de las diversas actividades realizadas por la línea de Productos Ecológicos y RSE de la Fundación Juan XXIII Roncalli, apoyando de esta manera la continuidad de nuestro proyecto de inclusión social de personas con discapacidad.
Campañas de Hábitos Saludables y Sostenibles, Talleres de Reciclaje y de Cocina Saludable, Sesiones Formativas sobre Alimentación Saludable, Deporte y Salud, Agricultura Ecológica y Sostenibilidad, Jornadas de Voluntariado Inclusivo y Solidario , Jornadas de Convivencia y Valores en la Fundación y un Campamento Urbano de promoción de Valores, son algunas de las 130 actividades realizadas este 2016. Todas con un único objetivo: promover en la sociedad la inclusión de las personas con discapacidad intelectual y fomentar la responsabilidad social hacia el medioambiente, los hábitos sostenibles y la mejora de la salud y la calidad de vida de las personas.
Todo ello, gracias a la colaboración de más de 90 empresas que apuestan por invertir en lo social y en el desarrollo de las personas con discapacidad. “La responsabilidad con los aspectos sociales de nuestro entorno y la protección del medioambiente no es sólo cosa de las ONG, es de todos los actores de nuestra sociedad y estas empresas deberían ser un ejemplo a seguir”, resalta la gerente de la línea de Productos Ecológicos y RSE de la Fundación, Thais Valero.
La gerente de la línea también explica que “las empresas que colaboran con la Fundación diseñando sus planes de responsabilidad social con nuestro apoyo están incidiendo directamente en el desarrollo de las personas con discapacidad intelectual, en el empoderamiento de las mismas y en la creación de oportunidades para su integración social y laboral en la sociedad”.
Las actividades citadas anteriormente permitieron involucrar a los trabajadores y trabajadoras de las empresas colaboradoras, así como en algunos casos sus familias, en compartir experiencias y colaborar en igualdad con las personas con discapacidad intelectual atendidas por la Fundación. Una vivencia única que tuvo como resultado desmontar los prejuicios y estereotipos hacia la discapacidad intelectual.
En ese sentido, los más de un centenar de testimonios de las personas voluntarias que a lo largo del 2016 participaron en las actividades, evidenciaron que son muchas las capacidades y lo que pueden aportar las personas con discapacidad a la sociedad si creamos espacios para ello:
“Estoy sorprendida de las muchas cosas que pueden llegar a hacer y creo que somos nosotros quienes les ponemos límites”
“Solo puedo estar agradecido, hay que reconocer el trabajo que hace la Fundación”,
“Es una buena forma de concienciar que todos somos iguales, ya que nos permite estar con otras personas que tienen otro tipo de capacidades y necesidades, y de las que podemos aprender mucho”.
Desde todo el equipo de Productos Ecológicos y RSE, en este año que inicia quiere dar las gracias a todas las empresas y las personas que han contribuido a la continuidad de nuestro proyecto y a la creación de oportunidades para la integración de las personas con discapacidad intelectual.
https://www.youtube.com/watch?v=dYlgTBF63r4