Receta Ecológica. Salsa Naranja de Curry
Descubre los sabores exóticos orientales en una sola salsa
Los países orientales son conocidos por utilizar toda clase de especias en sus platos, los cuales le dan ese sabor distintivo que hace que tu te traslada aunque nunca hayas estado allí. También de es común saber que debido al uso de estos condimentos, sus índices de enfermedades y mortandad prematura son menores que en los países occidentales. Un ejemplo de ello es la cúrcuma en la cocina india, utilizada desde hace miles de años como hierba medicinal, puesto que está demostrado que tiene efecto antiinflamatorio y de desinfección, haciéndola una alternativa saludable ante algunos medicamentos que tienen efectos secundarios negativos para el organismo.
Otro ejemplo es el caso del jengibre en la cocina china, también utilizada desde la antigüedad por sus propiedades curativas, además de su sabor característico que da lugar a preparar platos exóticos y tan distintivos como los de la comida china. Ayuda al buen funcionamiento del sistema inmunitario y gastrointestinal, como también es un buen aliado contra algunos tipos de cáncer.
Por estas razones, y muchas otras más, proponemos dar mayor participación a las especias y hierbas aromáticas en la preparación de nuestros platos, puesto que con ello ganaremos en sabor y salud, agregando la versatilidad que nos brindan, dejando de lado la monotonía culinaria y dando paso a la creatividad y las buenas costumbres de comer saludable, de cambiar el concepto de "comer por placer" sino más bien de alimentar nuestro cuerpo con lo que mejor nos hace.
Esta receta, Salsa Naranja de Curry, debe su nombre a la mezcla de especias que le da el color y sabor de un curry fresco elaborado al instante, muy distinto al industrial que podemos encontrar en las tiendas. Es un plato elaborado con productos ecológicos de fácil adquisición, los cuales podrás encontrar en tu tienda eco más cercana, y otros en nuestra cesta de verduras ecológicas de esta semana.
Receta Ecológica. Salsa Naranja de Curry
Pon a cocer la calabaza en una caserola con agua y sal. Sofríe los ajos y luego resérvalos. En el aceite de los ajos, pocha la cebolla. Mientras, maja los ajos en un mortero junto al cardamomo, cilantro, un pedacito de cúrcuma fresca, otro tanto de jengibre fresco y la cayena (opcional). Agrega a la mezcla media cucharadita de cúrcuma en polvo para dar color y una pizca de canela. Viértelos en la sartén con la cebolla y deja cocer unos minutos. Añade un chorrito de vino y una taza de agua de cocer la calabaza. Deja cocer hasta que se reduzca el agua y luego tritura en la batidora junto con la calabaza. Aligera el espesor con el agua de calabaza si es necesario. Lleva al fuego 5 min más y listo. Perfecta para acompañar carnes, pescado o simplemente para consumir como un caldo como entrante.
Recuerda que el tiempo que inviertes en la cocina te lo ahorras en el hospital.
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¿Te atreves?
