¿En qué consiste un Centro de Atención Temprana?
Los Centros de Atención Temprana cuentan con profesionales multidisciplinares que están especializados en desarrollo infantil. Brindan atención asistencial a los niños que presentan un trastorno del desarrollo, o que tienen riesgo de presentarlo, y a su entorno familiar. En este artículo, te contamos más sobre la labor que realizan.
¿Qué es la atención temprana?
El Libro Blanco de la Atención Temprana la define como el conjunto de intervenciones dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, a la familia y al entorno, que tienen como objetivo dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que tienen los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen riesgo de presentarlo.
Estas intervenciones deben considerar la globalidad del niño y deben ser planificadas por un equipo de profesionales multidisciplinar, que incluye a especialistas en psicología, logopedia y fisioterapia, entre otros.
La atención temprana es muy importante porque el cerebro presenta una gran plasticidad en los primeros años de vida, que es cuando ocurren hitos tan importantes como el control postural, la autonomía de desplazamiento, la comunicación, el lenguaje verbal y la interacción social. Proporcionando a los pequeños los estímulos adecuados, se puede potenciar su desarrollo motor o cerebral, siempre respetando el ritmo de cada individuo.
De este modo, un Centro de Atención Temprana presta servicios orientados a potenciar y desarrollar capacidades físicas, intelectuales y afectivas de niños y niñas, tanto en las primeras etapas de sus vidas como en el resto de su infancia, para cumplir los siguientes objetivos:
- Promover el desarrollo psicomotor del niño o niña.
- Planificar las acciones con el objetivo de favorecer la integración familiar, educativa y socioambiental.
- Introducir los mecanismos de compensación necesarios, de eliminación de barreras y adaptación a necesidades específicas.
- Atender y cubrir las necesidades y demandas de la familia y el entorno.
- Valorar las necesidades de cada persona y los tratamientos que requiere.
- Considerar al niño como sujeto activo de la intervención.
- Ofrecer información sobre recursos externos beneficiosos y que faciliten un mayor nivel de inclusión.
¿Qué actividades se realizan en un Centro de Atención Temprana?
Las actividades que se realizan en un Centro de Atención Temprana son tanto de apoyo como preventivas. Algunas de ellas son:
- Atención terapéutica. La atención terapéutica es el alma de un Centro de Atención Temprana. En este servicio de llevan a cabo actividades de estimulación, incluyendo la estimulación multisensorial Snoezelen mediante una sala que trabaja los sentidos (vista, tacto, oído…) y la propiocepción para ayudar a las personas a conectar con el entorno que las rodea, ayudando a que desarrollen nuevas sensaciones y percepciones.
Las interacciones más importantes se dan a través del juego. No se trata de que los niños y niñas realicen actividades divertidas en las que están involucrados objetos, sonidos o colores, sino de que, durante esa actividad, los pequeños deben decidir qué quieren llevar consigo, han de planificar nuevas tareas, establecen nuevas relaciones con las personas o los objetos y se enfrentan a nuevas emociones.
También se realizan actividades de fisioterapia, psicomotricidad, terapia ocupacional, psicoterapia y nutrición y dietética, en función de las necesidades de cada usuario.
- Evaluación y valoración. Consiste en identificar las necesidades de los menores y las familias, establecer objetivos y valorar la consecución de estos, así como abordar las variaciones o evoluciones que puedan ocurrir en la situación.
- Atención sociofamiliar. Este servicio se enfoca en mejorar la calidad de vida del niño o niña y de su familia mediante recursos como apoyo terapéutico, programas de apoyo familiar, escuelas de padres, terapia familiar, grupos de opinión, etc. El objetivo es ayudar a que la familia construya entornos más inclusivos y apoyar a las familias para que no pierdan su confianza en sus roles de madres, padres, hermanos…
En FUNDACIÓN JUAN XXIII contamos con todos los recursos necesarios para apoyar a las personas con discapacidad intelectual y a sus familias en todas las fases de la vida, desde una atención temprana, hasta la transición a la vida adulta.
De este modo, con las herramientas y los apoyos necesarios para cada etapa, se consigue desarrollar el potencial de todas las personas para que alcancen el mayor grado de independencia y autonomía posible.