El año 2023 fue un gran año en materia de Compliance para FUNDACIÓN JUAN XXIII. La Fundación se convirtió en la primera entidad del Tercer Sector, y séptima de España, en obtener la certificación AENOR de Sistemas de Gestión de Compliance UNE-ISO 37301:2021, evidenciando así su compromiso en las iniciativas vinculadas al buen gobierno, control interno y transparencia.
Este hito fundamental para la Fundación supone, además de una inmensa alegría y orgullo, una grandísima responsabilidad. Abordar esta tarea ha conllevado superar una serie de retos, el primero de todos ellos la propia toma de decisión de iniciar el camino. La Fundación cuenta ya con otras certificaciones ISO (Medio ambiente, Calidad y Ciberseguridad), pero el objetivo era poder instaurar un control global de los riesgos operacionales. La ISO 37.301 cumple estos requisitos, así que se tomó la decisión de comenzar con el proceso para la obtención. Se quería contar con una certificación independiente e internacional para ofrecer confianza a todos nuestros stakeholders, ya sean externos como clientes, donantes, proveedores, etc., ya sean internos, como el personal, las familias, los usuarios… No se conocían, además, ejemplos del Tercer Sector que hubieran recorrido ya el camino, y casi tampoco ninguno de otras entidades, pero se asumió el reto igualmente. El Tercer Sector debe estar presente y las exigencias de excelencia en gestión, transparencia y buen gobierno lo son para todos. Incluso, por los beneficios fiscales que tienen las entidades del sector y por el compromiso que adquieren con los donantes, la exigencia y auto exigencia debe ser y es muy alta.
El proceso es un proceso arduo y duro, pero tremendamente provechoso y útil. Requiere de un gran compromiso a todos los niveles, es un proceso intenso en el que te sometes a una reflexión profunda de la organización. Conlleva una identificación de las obligaciones, la consecuencia de su incumplimiento, cuál es el riesgo de incumplimiento y qué control se puede instaurar para no incumplir.
Igualmente positiva es la detección de las obligaciones legales pero, también, de las obligaciones de autorregulación con las que la Fundación está comprometida. Te reta a incluir el cumplimiento desde el diseño y por defecto, concienciar a todos los niveles de que el cumplimiento debe estar presente desde el primer momento, generando la llamada cultura del cumplimiento. La cultura es uno de los valores de FUNDACIÓN JUAN XXIII, junto a la fraternidad, la integridad, la alegría…De ahí que se haya unido la cultura con el liderazgo, permeabilizando estos conceptos a todos los niveles.
Antes incluso de la entrada en vigor de la Ley 2/2023, de 20 de febrero, reguladora de la protección de las personas que informen sobre infracciones normativas y de lucha contra la corrupción, FUNDACIÓN JUAN XXIII ya contaba con un Canal de denuncias, Canal que se ha adaptado a los cambios normativos para el Sistema Interno de Información.
La obtención de esta certificación ha despertado gran interés tanto entre los medios de comunicación, ya que muchos de ellos se han hecho eco de la noticia, como entre diferentes organizaciones del sector del Compliance, al considerar que la experiencia de Fundación Juan XXIII puede aportar gran valor a otras entidades del Tercer Sector que quieran iniciarse en este camino.
Abordamos pues el 2024 con el reto de continuar en el desarrollo e implementación de los compromisos obtenidos y de los sistemas de control instaurados, guiados por el principio de mejora continua. Estamos seguros de que la decisión de comenzar este camino fue la correcta y que poder contar con un sistema de gestión de Compliance es muy positivo, tanto para la Fundación como para todas las personas, físicas y jurídicas, con las que nos relacionamos. Contar con el certificado AENOR que evidencia que nuestro sistema es conforme a la norma UNE-ISO 37301:2021 es una garantía que debería abrir paso en el sector.
